Cuatro momentos emotivo-intelectuales cuatro
- Bart Simpson llorando porque, como siempre, ha reprobado un examen, pero esta vez había hecho el esfuerzo de estudiar.
- En una de las tantas entrevistas a Richard Feynman, cuenta el momento en que un rabino le dijo que determinado contenido de la Torá debía tomarlo como metáfora. El niño Feynman se pone a llorar porque entonces ya no sabe qué es verdad y que es mentira.
- La desazón de Guillermo de Baskerville en El nombre de la rosa al descubrir que ha llegado a la verdad por un razonamiento correcto pero con premisas equivocadas.
- La pesadilla de la científica encarnada por Jodie Foster en Contacto, al tener una experiencia importantísima pero personal e intransferible y por lo tanto inservible como resultado científico.
- De yapa, una alegre. En La estatua interior, la autobiografía de François Jacob, narra una pasantía en Estados Unidos en la que no logra llevar a cabo la reacción que necesita. Cuando ya faltan pocos días para el fin de la pasantía, deciden con su compañero de laboratorio declararse derrotados; llaman a sus parejas y se van a la playa. Mientras están ahí, se dan cuenta de lo que estaba fallando y vuelven corriendo al laboratorio para comprobarlo. Afortunadamente estaban en lo cierto, sino sus esposas los hubieran matado.
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