miércoles, 19 de febrero de 2020

Pedir permiso

Cuando entramos en casa ajena pedimos permiso, cuando adelantamos a alguien en un paso angosto, pedimos permiso. Esto no es más que demostrar buenos modales. ES OBVIO que nos van a dejar pasar, si no ni lo pediríamos. Con lo que las convenciones sociales terminan en que realmente nunca nos ponemos en posición de depender de la autorización del otro.
La verdad es que sistemáticamente manipulamos las situaciones para esquivar toda necesidad de consenso.
¿Vieron cómo se ofende alguien cuando pide las cosas de manera correcta y le dicen que no?
¿Acaso es tonto, se cree que por ser educado tiene derecho a todo? No, claro que no. Se creía con derecho a lo que pedía, y las formas eran simplemente el reconocimiento de que existe con el otro una tregua que lo inhibe de tomar por la fuerza lo buscado.
Pedir permiso de verdad debería ser una forma de sometimiento profundo y voluntario.
Tampoco ri por la vida así, pero un día en la vida...

No hay comentarios:

Publicar un comentario