viernes, 31 de enero de 2020

Hacer cucharita

Si fuera por mí, habría un Día Nacional de Hacer Cucharita. Debería estar en la Constitución, debería estar en la Declaración de los Derechos Humanos.
No dejen de hacer cucharita, no pierdan el tiempo en boludeces cuando podrían hacer cucharita.
Tampoco dejen a nadie sin la oportunidad, sean solidarios.
Hay mucha gente por ahí dando vueltas sin tener quien la abrace. Por descuido del destino, por pereza del cariño, por la saña de los hombres. Es una picardía que no se remedie.

jueves, 30 de enero de 2020

Dejar para después

Casi termina enero, desde que empezó el año cada día es un desafío.
Es obvio que nos merecemos un día de vicio y decadencia moderada.
Según una tesis nunca escrita, cada síntoma humano es una respuesta adecuada en algún contexto (donde "adecuada" no implica que conduzca al éxito individual, manga de occidentales egocéntricos).
Luego (sic), la nunca bien ponderada procastinación debe servir de algo. Puede que más tarde lo lamentemos, pero si no se pudiera dejar para después la cosas la vida sería irrespirable.
Pero más aún: casi todos nuestros vínculos más importantes exigen que cada tanto posterguemos cosas para atender necesidades ajenas. Postergar es altruista.
La mayor objeción consiste en señalar que la postergación como síntoma se dirige precisamente a aquellas cosas que más deseamos. Según esto, nos priva de nuestra mayor felicidad, si se supone que la felicidad radica en alcanzar aquello que se desea.
Es una suposición sumamente ingenua, desde que la felicidad se alcanza por otro camino. Y en ese camino, es esencial que se interponga el dejar para después.
La explicación tendrá que esperar.

miércoles, 29 de enero de 2020

Aguantar

No hay una razón en particular, ni tampoco es algo que tenga sentido o que traiga consecuencias. A veces simplemente toca, y hoy toca. Hay días en que se hacen cosas, o se piensan, y días en que pasan cosas. Y de las cosas que pasan, algunas se aprovechan, otras se reciben como muy esperadas, otras se evitas, y las de hoy se aguantan. Cada uno como puede, es cierto, mejor o no tan bien.
No falta quien pretenda hacer un arte de aguantar, o un motivo de orgullo, un don natural como chiflar fuerte o dar vuelta los ojos.
Yo creo que no debe haber cosa más fácil que aguantar, al punto que a veces pierdo al empatía por las personas impacientes, quejosas y mal sufridas.
Vamos: es una cuestión de termodinámica. Se trata de no hacer nada, necesariamente tiene que ser más fácil que hacer algo. Hasta quejarse consume energía y voluntad.
No acepto las justificaciones basadas en el principio de acción y reacción: uno no es un resorte. Si se recibe un golpe, la energía se disipa y para devolverlo, hay que poner más.
Si hay una "descarga" tiene que ser que hay energía acumulada de antes, por uno mismo, que no tiene nada que ver con lo que está pasando en el momento. Lo que pasa tiene que ser a lo sumo como un gatillo, que dispara algo ya preparado. Pero volvemos al problema de antes ¿por qué estaríamos acumulando energía, siempre tomando impulso para cuando nos pase algo?
Ah, pero aguantar duele, y el dolor, etc. El dolor es un misterio, pero nunca puede exceder nuestra medida, cuando eso pasa te desmayás, no reaccionás.
Si fuera posible desmayarse a voluntad...

martes, 28 de enero de 2020

Patear una piedrita

Vicio de caminadores, llevar una piedrita (puede ser cualquier objeto pequeño encontrado por el camino) a lo largo del paseo, tratando de que no se vaya a la calle ni se caiga a un pozo.
Si se camina de a dos, ya es cosa de puntuar el diálogo con el puntín, pasarla y hacer "pared".
Imagino que los grandes avances del pensamiento sólo fueron posibles porque había piedras en el camino.
Los fanfarrones prefieren patear una lata, pero el ruido constante no favorece la reflexión: se necesitan intervalos.
Tal vez en el futuro vivamos conectados a máquinas y necesitemos que éstas hagan ruiditos intermitentes para que podamos estar despiertos.
Tal vez habría que inventar máquinas que sólo sirvan para marcar un pulso irregular, pero existe el peligro de que dejemos dormir, o que nos olvidemos de caminar.
Sobre todo de caminar juntos.

lunes, 27 de enero de 2020

Adelantar trabajo

Ahhh, ideal para un lunes.
Ya estamos de vuelta en casa? Arrancamos bien? Arrancamos a los tirones?
No importa, no hay mejor día que el lunes para ir adelantando cositas.
Por qué? Pues porque no hay ningún programa a la vista!
Nadie sale el lunes, nadie juega el lunes. La peluquería cierra el lunes.
No hay teatros los lunes.
Lo que hay es mucha necesidad de encontrarle sentido a la vida, los lunes.
Y como el único sentido comprobable de la vida es hacia adelante... adelantemos nomás.

domingo, 26 de enero de 2020

Cerrar un trato

Y claro que los días de enero son mayormente de empezar cosas.
Los marineros dicen "cuando salgas a navegar, no te canses de preparar". Pero el Martín Fierro dice "Parece que sin largar, se cansaron en partidas" (no me hagan explicar qué son las partidas).
Hay que buscar el equilibrizzzzzzzzz.
No: hay que empezar, que ya estamos grandecitos.
Por más vueltas de dé la taba, si tiene que caer de culo, culo será.
(No, no es el día de ser gauchesco. Bzz! bzzzzz!)
Apúrense: no hacen falta muchas explicaciones, basta un "Hola, de lo que hablamos, vamos en esa".
Nada de pedir condiciones, si uno está en posición de exigirlas, va a estar mucho mejor después de cerrar, y si uno no está en esa posición, es estúpido pretender: resignarse o retirarse.
El regateo mañana, o ayer. Hoy se cierra para bien o para mal.
"No es para mal de todos, sino para bien de ninguno"
gggggggggg


sábado, 25 de enero de 2020

Iniciar una leyenda

Ahora que estamos un poquito más sueltos para la ficción, es el momento de poner la semillita del mito.
La verdaderas leyendas no empezaron, como suponen algunos, con relatos heroicos y héroes populares. La prueba está en que ninguno de esos pasó de famoso de la historia. Alguien sabe donde fué la batalla de Maldón? Quién, aparte de Fabián Poloszeki oyó hablar de Latita?
Los grandes sucesos no hacen las leyendas, sino los bolazos.
Piensen ¿Qué hacía la humanidad cuando no existían el cine, la animación 3D, Netflix?
Bolaceaba.
Se puede empezar como Don Jovino Cerón, que entretenía a los clientes de los bares chilenos con su aventura de "La cuesta del Diablo".
O ir a buscar OVNIs al Uritorco.
Cada leyenda que sirva de algo empezó con un puñado de seres ociosos necesitados de entretenimiento.

viernes, 24 de enero de 2020

Mandar fruta

Esta vez sí es con metáfora. Hoy es uno de esos días en que se impone la necesidad de guitarrear, sanatear, chamuyar, vender un buzón.
Qué feo, don. Cómo va a recomendar eso...
Y, no es que lo recomiende, pero sinceramente: las alternativas son peores para todos hoy.
No me miren a mí, el universo conspira para que la mejor opción sea armar un discursito convincente y salir del paso.
Eso sí, igual hay que esforzarse, eh. Hagan el favor: respeten un poco las convenciones sociales.
Una mentira obvia es un insulto, además, y a nadie le gusta que lo tomen por idiota.
Un verso elaborado demuestra interés, no solo en la causa, sino que al lucirse con la historia, le estamos diciendo al otro "me importa mucho tu opinión, veo que no sos ningún boludo, no te ofendas conmigo".
¿Quién no se conmueve con eso? Y por supuesto, a la hora de recibir fruta, seamos también consecuentes. No nos pongamos en ortibas que hoy vamos a estar necesariamente de los dos lados del mostrador.
Pongamos todos el hombro para terminar la semana en paz.
Esto también es sabiduría.

jueves, 23 de enero de 2020

Tirarse a la pileta

Sin metáforas, hace un calor infernal y quienes no se sumerjan por completo en agua fresca sufrirán pérdida de masa encefálica.
Sí, aunque tengan el aire en 15º.
Qué puedo decir no estaba en mis planes, pero hay que improvisar. Algo se salvará? Valdrá la pena que se haya salvado?

miércoles, 22 de enero de 2020

Tener un tropiezo

Eso de caerse y levantarse es una obviedad, y como todas las llamadas a la perseverancia, la resiliencia y la actitud positiva, una verdadera estafa.
Para lo único que sirve esa épica inspirada en la pasión de Jesucristo es para dar profundidad a la expresión "Me caigo y me levanto".
Tropezar es otra cosa, porque es la forma por excelencia de iniciar una historia.
¿Notaron que los verdaderos héroes siempre arrancan con un tropiezo?
Como escribió el inefable Fontanarrosa "Para ser baqueano hay que perderse una vez".
Bueno: para vivir de verdad hay que meter la pata.
Después de todo, uno solamente se tropieza en serio con sus propios cordones.

martes, 21 de enero de 2020

Mirar una película vieja

El cine antiguo está sobrevalorado, lo sé. Por más que hay obras que son pioneras, de las que la industria vive tomando prestadas ideas y recursos, también es cierto que sobre esas ideas originales se ha trabajado y perfeccionado el arte.
Si se trata de resultados, no hay dudas de que el enano en los hombros del gigante llega más alto. Y como espectador, elijo los resultados.
Al menos como espectador de cine.
Así que cuando se busca una película antigua, no creo muy aconsejable buscar o esperar el deslumbramiento (al menos sincero) frente a la originalidad. Nos pasa un poco como cuando escuchamos por primera vez a Jimmy Hendrix: son cosas que ya hemos oído muchas veces, y mejoradas, depuradas por la técnica, maximizadas por los recursos más modernos.
Para los espíritus curiosos, el cine antiguo trae la sorpresa de cosas desusadas, la extrañeza de una lengua parcialmente muerta. Puestos en este plan, cuanto más antigua y marginal es una producción, mejor.
Para quienes no buscan más que entretenimiento, ver una película vieja, que tal vez ya se vió en su estreno, es una oportunidad de recapitular. Ya desde la misma elección podríamos tomar noticia de a qué tiempo de nuestra vida nos queremos acercar.
La experiencia nos va a dejar con otra perspectiva de qué hicimos entretanto con nuestra vida.
O no, pero siempre es bueno intentar.

lunes, 20 de enero de 2020

Soñar despierto

Esto es algo que ya hicieron muchas veces. Claro que a veces se exagera y se presenta como un proceso casi alucinatorio.
También se menosprecia su valor por su falta de objetividad, y hasta se llega a ver como un vicio el hábito de fantasear en horas laborales.
Para poner las cosas en su lugar, sí es problemático cuando el ensueño diurno usurpa el lugar de la planificación más estricta. Y les pasa a todos: en cuanto se encuentra una porción de realidad de la que nos falta información, la fantasía la cubre. Incluso le ocurre a las personas con demencia, o como se dice ahora "con Alzehimer": el fenómeno se llama "fabulación" y no tiene nada que ver con la mitomanía, sino que la persona no tiene posibilidad de identificar un recuerdo falso, y lo percibe como real.
Pero el ensueño diurno tiene una función importantísima: nos provee de placer gratuito y sin daño. Y a la policía moral le decimos que justamente las personas caen en "vicios" porque no tienen suficientemente desarrollado el recurso de soñar despiertos.

domingo, 19 de enero de 2020

Alcanzar una Utopía

Antes de que empiecen a llorar imposibilidad les aclaro varias cosas:
Las Utopías no son excluyentes, el mundo es muy amplio y las Utopías no son Universos.
Eso de que son inalcanzables es puro verso del conformismo: lo más frecuente es que las pasemos de largo.
Todos tenemos la nuestra, pero no necesariamente estamos destinados a alcanzarla.
Lo que no les dije es que 
SE PUEDE ALCANZAR LA UTOPÍA DE OTRO
Pero sí, hombre! Lo mismo pasa con todas las aspiraciones, por más que el ego les haga creer lo contrario: las penas son de nosotros, las fantasías son ajenas.
Y... pero hoy, justo hoy?
Y bueno, sí, es hoy.
No, mañana es tarde.
No, no hay otra oportunidad.
Peroperoperopeorperoperoperoperoperoperopero...
Qué cruel el destino crueeeeellll.
En lugar de quejarse, mejor sería ponerse en movimiento.
Mañana hablamos.

sábado, 18 de enero de 2020

Dormir en el piso

Si es posible con una colchoneta, eh. No hay porqué romperse los huesos, la idea es simplificarse la vida, no hacer penitencia.
A mí particularmente, me recuerda veranos de la infancia, cuando el calor en los dormitorios no aflojaba y la forma de dormir era tirar los colchones en el living. Nunca entendí por qué ese lugar era más fresco, cuál era la virtud que convertía el mismo espacio donde me pasaba la tarde mirando dibujitos en una especie de nave mágica donde uno volvía a soñar.
Es algo que funciona donde quiera: y no me vengan con el que duerme en la calle, porque eso también lo hice.
Dormir en el piso es levantar de la nada un santuario.

viernes, 17 de enero de 2020

Cenar livianito

Va a salir? Cene liviano
Va a tener sexo? Cene liviano
Tuvo un día cansador? Cene liviano
Desperdició si vida? Cene liviano
Se enamoró ayer? Cene liviano
Se va para no volver? Cene liviano
Aprendió la lección? Cene liviano
Llora con una canción de Zitarrosa? Cene liviano
Perdió las llaves? Cene liviano
Le gusta guardar secretos? Cene liviano
Quiere tener un sueño lúcido? Cene liviano
Quiere tener un sueño húmedo? Cene liviano
Le mojaron la oreja? Cene liviano
Recién se da cuenta de que todos los cancheritos son unos forros? Cene liviano
Le parece que estoy exagerando? Cene liviano
Piensa que esta vez es diferente? Cene liviano
Metió la pata hasta el caracú? Cene liviano
Nunca tuvo un buen hogar? Cene liviano
Dios es una máquina de humo.

jueves, 16 de enero de 2020

Hacer una apuesta

Hay muchas formas de apostar. Los filósofos afirman que estamos todo el tiempo apostando. Los filósofos y los viejos que se juntan en la agencia de quiniela a ver el turf.
Pero es cierto que como en todo juego hay buenos y malos jugadores:
Están los que quieren asegurarse y especulan al máximo, están los que siguen un pálpito, están los malos perdedores, los que sienten culpa, los que no quieren pagar.
Secretamente, cada jugador vive una epopeya en la que un día derrotará a la banca.
Secretamente, hasta el chico que juega a no pisar las baldosas está en eso.
Si quieren mi consejo, compren un boleto de La Solidaria.

miércoles, 15 de enero de 2020

Ordenar prioridades

Pero claro! No se puede pasar todo el año haciendo pavaditas. Acá se juega la posta, de una vez para el resto del año.
Por qué hoy? porque el tiempo corre, viejo.
Por qué no antes? porque el tiempo no era suficiente.
Capaz no se sienten reparados, o tienen dudas. Mren: si tienen dudas ahora las van a tener el resto del año. No se trata de esperar a que se aclaren sino de avanzar en la oscuridad.
Se puede confiar mucho más en la intuición apresurada que en la torpe reflexión.
Al fin y al cabo, la mejor cadena de razonamientos SIEMPRE  los va a llevar a resultados contradictorios, si la siguen lo suficientemente lejos.
No es filosofía esto, ah: es matemática y lo demostró el señor Gödel.
Entonces, estamos de acuerdo: la razón no sirve para decidir. Mejor decidir con el culo que con la cabeza. Por lo menos el culo te sostiene.

martes, 14 de enero de 2020

Usar auriculares

Sí, sí: hay muchos que ya van por la vida con sus auriculares como un traje espacial que los protege del mundanal ruido. Eso está muy bien. Pero qué pasa cuando los auriculares los seguimos usando para interactuar con los demás? Pasa eso, que hablamos fuerte.
Un consejo: tratar de mantener una colocación alta de la voz, como si el aire tuviera que salir por una chimenea arriba de la frente. Esto va a evitar que al final del día uno tenga la voz como Adriana Varela.

lunes, 13 de enero de 2020

Quedar bien

Nada meritorio. Hacer de tripas corazón y decirle a la bruja de mesa de entradas qué lindo prendedor, elogiar la corbata del pelotudo supervisor.
Pero eso es horrible!
Chocolate por la noticia: el mundo es horrible. Es deshonesto, y un infierno. Pero qué lindo también cuando alguien te convida factura, no? Y acaso cuesta mucho?
No nos cuesta: si no lo hacemos es sólo porque nos dijeron que está mal.
O será sólo eso?
Nos sentimos humillados por complacer a otros?
En qué nos afecta?
A lo mejor el otro no nos devuelve el favor. Es eso? Parece un motivo bien miserable.
Aparte, nadie dice que haya que ser un chupamedias por un día: no hay nada que ganar, ningún premio más allá de irse desprendiendo de uno mismo.

domingo, 12 de enero de 2020

Contarse un sueño

Qué soñaste anoche? Ayer? En la semana? Tenés algún sueño que vuelve? Muchos tenemos sueños parecidos: los de volar, de caer, de perderse en pasillos, de hospitales, de gente que se mete en la casa, de subir escaleras, de estar desnudos.
Yo tengo un sueño con una Estanciera en un bosque de eucaliptus.
También sueños donde le doy un beso en la boca a la chica que me gusta.
Y eso es todo, o casi todo.
Cuando tengo un mal sueño pido un abrazo, pero no cuento lo que soñé.
Quién nos cuenta los sueños que tenemos?

sábado, 11 de enero de 2020

Pagar una deuda

Y si no tengo deudas? Mentiiiiiiiiira!
La deuda nos estructura, nadie vive sin crédito. Nadie llegó a ningún lado solo con su esfuerzo.
Ya sea un préstamo salvador, un plan de cuotas, o un vueltito. No hay lazo social sin deuda.
Así como deber nos une, pagar nos libera.
A pagar.
Poniendo estaba la gansa.

viernes, 10 de enero de 2020

Usar ropa interior...

Del otro sexo. Alguna vez hay que hacerlo, y quien ya lo ha hecho que aproveche y repita.
Disfrutar de escándalo en secreto, la tormenta dentro de un vaso, y en el caso de los varones, la tanga en la raya del culo.
Todas las personas que lo han probado afirman que pasado un rato la novedad deja paso a una comodidad sorprendente. Esto no puede ser casualidad.
Decididamente los diseñadores de ropa la están pifiando fiero si a todas las mujeres les cae súper confortable un slip o un boxer, y a los hombres una tanga.
¿Tendrán sujetos de prueba para testear los nuevos modelos?
A modo de ilustración, cuando la NASA empezó a mandar mujeres al espacio, hubo que buscar nuevos dispositivos para que hagan pis y caca. Los astronautas varones venían usando unas bolsas que se pegaban al cuerpo.
Pero para las mujeres decidieron usar pañales.
Resultaron tan buenos que al final los varones los probaron y decidieron que también eran mejores para ellos.

miércoles, 8 de enero de 2020

Cambiar la hora

Sigamos gediendo con la temporalidad.
Las mismas cosas tienen sentidos diferentes en distintos momentos. Tal vez por una cuestión de contexto, sí: no estamos en el mismo lugar a la mañana que al mediodía. Nos rodea otra gente, otras cosas, otras necesidades.
Es también un recurso muy bien aprovechado por los humoristas, como William Shakespeare, al repetir una misma frase en puntos sucesivos del diálogo. Mi ejemplo favorito es el del Bastardo de "Rey Juan" bardeando a un lord francés.
Visto y considerando que podemos crea sentido de la nada con este truco temporal, la misión de hoy es cambiar la hora de algún hábito, alguna rutina.
Arrancar el día doblando la ropa en lugar de dejarlo para la noche, o dejar para la noche la lectura del diario.
También vale juntarse a tomar birra antes de trabajar en lugar de despúes, eso seguro traerá cambios a tu vida, jajja
ADVERTENCIA- no vale cambiar de hora la medicación sin consultar al médico.

martes, 7 de enero de 2020

Buscar una letra

Con el tiempo se nos van pegando las canciones. La mayoría dan vueltas por un tiempo y se gastan, o son desplazadas por canciones nuevas. Pero algunas canciones se aferrar y resisten, se hacen un refugio en algún rincón poco transitado de la mente. Esas canciones vuelven una y otra vez: y es casi seguro que no sabemos la letra completa. Están rengas, y se tal vez por eso son recuerdos tan obstinados.
Llegó el momento de tomar coraje, abrir el buscador y tipear los versos que sabemos, abrir la letra de esa canción y repasarla hasta que se fije.
Puede pasar que habiendo aprendido podamos olvidar.

lunes, 6 de enero de 2020

Llegar tarde a todo

Y, sí. El cometido del día de hoy se impuso por fuerza, y no queda otra que rendirse a la irreversibilidad del tiempo.
En tu cara, Nietzsche.

domingo, 5 de enero de 2020

Escuchar covers

Se dice y redice que segundas partes nunca son buenas. Para ser una especie cuya subsistencia y progreso dependen de la repetición, nuestra sobrevaloración de los original llega a niveles ridículos. Vean si no los precios a los que se venden cuadros originales que a veces son un verdadero enchastre.
Con la música pasa algo parecido, aunque no tan exagerado, porque la música, como el teatro, como el baile, existe en la repetición.
Así y todo, se menosprecia y hasta se castiga la copia. Y en la música pop, las versiones de canciones ajenas tienen un lugar secundario, aceptado a lo sumo como homenaje, pero siempre menos valorado.
Pero es innegable que el cover puede y debería aspirar a ser una mejora. Cómo? Si ya tenemos el ejemplo, no sería lo más fácil para un artista tomar el original simplemente como punto de partida para alcanzar una mayor altura interpretativa?
Así ha sido y seguirá siendo. Por eso este domingo es día de escuchar covers, en especial esos que son mejores, hay muchos. 
Uno de mis preferidos es Revolution rock, por Los Fabulosos Cadillacs.

sábado, 4 de enero de 2020

Jugar al detective

Vamos a aprovechar el sábado como corresponde: viajando en subte con una libretita y una birome en la mano, mirando subrepticiamente a los pasajeros y anotando boludeces.

viernes, 3 de enero de 2020

Hacer una llamada

Revivamos el antiguo arte de la broma telefónica.
Hay que buscar una guía telefónica (en toda casa hay una escondida), llamar a cualquier número al azar y preguntar por José, por Marcelo o por el abogado.
No hace falta ser el doctor Tangalanga, eximio maestro que debería tener un monumento.
Vamos, que no queda mucho tiempo!

jueves, 2 de enero de 2020

Decir lo que no te gusta

Ay, dos de enero! Volvemos a trabajar y hay que hacer algo difícil!
Y pues, sí. Empecemos con ganas o no empecemos.
Ojo, no es cuestión de pasarse el día como una vieja chota criticando todo, no.
Más bien buscar a esa persona con la que está todo bien y decirle "Che, de onda, tal cosa que hacés es de cuarta". O plantarse con un jefe, porqué no, y poner los puntos sobre las íes.
Díganle a sus novias y novios que no tienen taaan buen culo, si son verdaderamente valientes.
Nombren algo que no les guste, puede que igual tampoco pase nada importante en todo el día.

miércoles, 1 de enero de 2020

Coleccionar...

Empiezo el año con una nueva misión.
Veamos, cada día será el día de, y al final del año, quien haya cumplido exitosamente cada paso de este camino, alcanzará un status de epifanía comparable al buda.
¿Qué es la budeidad? Preguntaron una vez a un maestro zen.
Bosta seca, respondió.
Así que hoy será día de coleccionar fósforos quemados.